voz del dios de las montañas
que anunciaba su vuelta en el concierto
maravilloso de sus siete cañas.
Y clamé y dijo mi palabra: “¡Es cierto,
el gran dios de la fuerza y de la vida,
Pan, el gran Pan de lo inmortal, no ha muerto!”
Volví la vista a la montaña erguida
como buscando la bicorne frente
que pone el sol en la alma del panida.
Y vi la singular doble serpiente
que enroscada al celeste caduceo
pasó sobre las olas de repente
REVELATION
From cliffs that were high and rocky,
my mouth engorged with wind and salt,
I launched my cry above the sea
into the infinite cobalt
vision and the blood-red sunset
that myths and miracles exalt.
I drank salt wind and won’t forget
the communion of communions
that left my mind’s meaning wounded.
Each beating heart and the living cells,
science-fired gut shining within,
constellations and their marvels.
I heard the mountain god begin
to speak with the music he knew—
a concert he played on seven
pipes. And then I shouted, “It’s true!
Pan, great god of vitality,
is alive and immortal, too!”
I stared at the peak and could see,
almost, double horns on a head,
a sunlit soul, Pan’s devotee.
The single double serpent sped
over waves. It was coiled around
a caduceus transported
llevada por Mercurio. Y mi deseo
tornó a Thalasa maternal la vista,
pues todo hallo en la mar cuando la veo.
Y vi azul y topacio y amatista,
oro, perla y argento y violeta,
y de la hija de Electra la conquista.
Y escuché el ronco ruido de trompeta
que del tritón el caracol derrama,
y a la sirena, amada del poeta.
Y con la voz de quien aspira y ama,
clamé: “¿Dónde está el dios que hace del lodo
con el hendido pie brotar el trigo
que a la tribu ideal salva en su exodo?”
Y oí dentro de mí: “Yo estoy contigo,
y estoy en ti y por ti: yo soy el Todo”.
[p 1907]
by Mercury. I was spellbound
by the thalassic mother, blessed
by this sea of all that I’ve found.
I saw blue, topaz, amethyst,
gold, pearls, silver, and violet,
and Electra’s daughter’s conquest.
And I heard the piercing trumpet
as it poured from the triton’s shell
and mermaids loved by the poet.
And as one who longs to love well,
I cried out, “Where’s the god who brings
forth wheat from mud, and plants that grew
to free this tribe from its wanderings?”
An inner voice said: “I’m with you,
in you, for you: I am All Things.”
LA CANCIÓN DE LOS PINOS
¡Oh pinos, oh hermanos en tierra y ambiente,
yo os amo! Sois dulces, sois buenos, sois graves.
Diríase un árbol que piensa y que siente,
mimado de auroras, poetas y aves.
Tocó vuestra frente la alada sandalia;
habéis sido mástil, proscenio, curul,
¡oh pinos solares, oh pinos de Italia,
bañados de gracia, de gloria, de azul!
Sombríos, sin oro del sol, taciturnos,
en medio de brumas glaciales y en
montañas de ensueños, oh pinos nocturnos,
¡oh pinos del norte, sois bellos también!
Con gestos de estatuas, de mimos, de actores,
tendiendo a la dulce caricia del mar,
¡oh pinos de Nápoles, rodeados de flores,
oh pinos divinos, no os puedo olvidar!
Cuando en mis errantes pasos peregrinos
la Isla Dorada me ha dado un rincón
do soñar mis sueños, encontré los pinos,
los pinos amados de mi corazón.
Amados por tristes, por blandos, por bellos.
Por su aroma, aroma de una inmensa flor,
por su aire de monjes, sus largos cabellos,
sus savias, ruidos y nidos de amor.
¡Oh pinos antiguos que agitara el viento
de las epopeyas, amados del sol!
THE SONG OF THE PINES
Pine trees! Brothers on land and in the air,
I love you all! You’re sweet, good, and somber.
One might say that you’re trees who think and care,
pampered by sunrises, poets, and birds.
The winged sandal must have grazed your brow.
You’re masts, proscenia, and a curule chair.
Solar pines! Pines from Italy! How
bathed you are in grace and blue glory there.
Without the
Elsa Day
Nick Place
Lillian Grant
Duncan McKenzie
Beth Kery
Brian Gallagher
Gayle Kasper
Cherry Kay
Chantal Fernando
Helen Scott Taylor